Taylor Swift se desmaquilla
La cantante y compositora de Pensilvania presenta, casi por sorpresa, "Folklore" (Universal/ Republic Records): un inspirado trabajo, concebido a lo largo del confinamiento por la Covid-19.
0
0
Taylor Swift llevaba hasta hace poco una carrera imparable de pop melodioso y electrónico, tras alejarse voluntariamente del country y el folk colorista que protagonizaron los inicios en la música de la pronto treinteañera.
Tan solo unos meses antes de la presentación de su octavo álbum de estudio, la premiada y popular artista exhibió su vena más eufórica -con electrónicas pintorescas y letras encendidas y pasionales- en el reciente Lover (2019); pero el periodo de encierro en su domicilio (correspondiente a las semanas más peligrosas en la expansión del coronavirus en USA) hizo que reflexionara sobre qué era lo que deseaba crear, después de sufrir tan asfixiante experiencia humana.
El resultado de tales conversaciones consigo misma lleva por título Folklore (Universal/ Republic Records): una obra más de sombras que de neones cegadores, desarrollada con la ayuda en la distancia de Jack Antonoff, Aaron Dessner (The National), y Justin Vernon (Bon Iver); aparte del granito de arena que puso el desconocido William Bowery. Un disco a 16 pistas, en el que Taylor Alison se dedica a abrir su faceta más sensible y cercana, desprendida de los aires de divismo rítmico que solía primar en sus anteriores CDs.
La repercusión de Folklore ha sido tal que, a tan solo tres días de su aparición, un buen número de críticos han señalado que se trata de una de las creaciones más brillantes de la trovadora estadounidense; la cual ha dado un giro notable a su estilo y a sus preferencias líricas. Sin embargo, este viraje es más que comprensible, si se contextualiza por la situación que lo ha generado, y que ha provocado una cascada de inspiraciones diferentes en la mente y los pentagramas de Swift.
A través de los múltiples segmentos narrativos que se entrelazan en Folklore, TS diseña imaginativas atmósferas; concebidas mediante teclados tenues, sintetizadores nostálgicos, guitarras acústicas de confesionalidad apremiante, y violines que acompañan a cada uno de los argumentos que toca la porosa voz de la autora de Reputation.
TAYLOR SWIFT ESTIMULA SU TALENTO INTERPRETATIVO
Pese a que muchos de sus colegas retrasaron el lanzamiento de sus nuevos trabajos por culpa de la pandemia, Taylor Swift tenía el pálpito de que Folklore debía ver la luz en estos oscuros tiempos de enfermedad e incertidumbre. Los miedos, inseguridades, sueños y anhelos que nutren los dieciséis cortes del octavo álbum de estudio de la norteamericana no tendrían el mismo sentido en una época de “normalidad” latente.
Todas las estrofas del disco están sujetas al momento en que fueron escritas, y por ello la intención de colarlas entre los aficionados sin enormes fastos publicitarios; como si pertenecieran a ese universo de contención obligada, padecida por los seres humanos por culpa del coronavirus.
Incluso las tramas de las canciones resultan extrañas en el repertorio de una mujer que se ha dedicado a sembrar con pinceladas autobiográficas cada uno de los hits que jalonan su exitosa carrera profesional. Ahora son sucesos ajenos, que ocurren a personas de las que deja una leve constancia, los que llaman la atención de Swift.
Una relación acabada por los excesos y las infidelidades (The 1), un paseo por las asunciones de la ingenuidad juvenil (Cardigan), la trágica existencia de un heredero acaudalado (The Last Great American Dynasty), la perspectiva de la realidad de una chica muerta (My Tears Ricochet), la neurosis de una mujer llevada al extremo de lo soportable por su pareja (Mad Woman), o los mensajes protectores de una madre a su hijo (Epiphany) son algunos de los relatos en blanco y negro que conjunta Folklore.
Un grupo de líricas tenues y atrayentes, en las que subyace el nervio atenuado de Taylor Swift. Composiciones que vienen a contradecir el lema de Cardigan: “When you are young, they assume you know nothing” (Cuando eres joven, ellos asumen que no sabes nada).
Vídeo oficial de Cardigan, por Taylor Swift y VEVO
Más información en
