Manuel Chaves Nogales, la obra de un periodista
Libros del Asteroide edita las obras completas del periodista Manuel Chaves Nogales: uno de los informadores españoles más importantes de la primera mitad del siglo XX; el cual fue cronista de la Guerra Civil Española, de la Segunda Guerra Mundial y de las actuaciones de la U.R.S.S. de Stalin.
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Manuel Chaves Nogales era un periodista que nunca mezcló sus opiniones con su trabajo como informador.
El que fuera brillante director del diario Ahora (de 1927 a 1937) siempre se mostró sujeto a la búsqueda de la verdad. Una norma inalterable, que permitió que por sus cuartillas de papel pasaran personajes de todo signo e ideología, desde un humilde ciudadano moscovita al maquiavélico Joseph Goebbels.
Bajo semejante tesis profesional, las crónicas de Chaves Nogales describieron con precisión y acordes sensitivos la fisonomía de un mundo en guerra, y en constante cambio social y político: un universo de muerte y persecución, que le obligó a exiliarse en varias ocasiones debido a su obsesión por preservar su independencia; para fallecer prematuramente a los cuarenta y seis años, en Inglaterra.
La vida de este observador de la realidad nacido en Sevilla bien podría ser considerada por sí sola un perfecto manual de estilo periodístico y literario. Una existencia aventurera y comprometida con los más débiles, que la editorial Libros del Asteroide ha intentado glosar, a través del suculento pack titulado simplemente Obra completa, diseñado con rigor e imaginación por Ignacio F. Garmendia.
Esta es la primera vez que se publican las crónicas y los textos literarios de Chaves Nogales de manera conjunta, desde los inicios en la capital hispalense del entonces joven redactor a sus nueve libros, entre los que se encuentran La ciudad; Narraciones maravillosas y biografías ejemplares; La vuelta a Europa en avión; La bolchevique enamorada; Lo que ha quedado del imperio de los zares; El maestro Juan Martínez estaba allí; Juan Belmonte, matador de toros; A sangre y fuego; y La agonía de Francia.
“Es el mejor periodista español, junto con Larra“, ha afirmado sobre Manuel Chaves Nogales el narrador Andrés Trapiello. Un honor o reconocimiento, que otorga justicia al trabajo de una persona que se erigió como un comunicador equidistante entre los bandos enfrentados en la Guerra Civil Española, y que denunció la falta de libertad que se extendía por el Viejo Continente, a través de la cobertura que dedicó al auge de los movimientos totalitarios.
MANUEL CHAVES NOGALES Y LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN
La manera en que Manuel Chaves Nogales entendía el Periodismo estaba íntimamente relacionada con el pulso y la rutina de los seres anónimos, los que sufrían las consecuencias de las insensateces y ambiciones patrioteras e imperialistas de los dictadores de turno. Esto se puede observar, por ejemplo, en los profundos acercamientos que hizo a lo largo de su breve estancia en la U.R.S.S. de Stalin; donde una simple conversación o mirada con un hombre o mujer de pueblo le servía para vestir una crónica sincera y demoledora, sobre los padecimientos de los más humildes en el país del yunque y el martillo. Lo mismo se puede decir de la España franquista y de la Francia esclavizada por los nazis.
La posibilidad de acceder al réquiem informativo titulado La agonía de Francia aún revive ecos de terror y asfixia con el impactante acercamiento que lleva a cabo Chaves Nogales, para relatar la ocupación de la nación de la enseña tricolor y de La Marsellesa a manos de las hordas atronadoras del Tercer Reich.
En cada uno de los trabajos firmados por MChN se percibe su habilidad para marcar el ritmo, siempre guardando un envidiable equilibrio entre la concatenación de los hechos, y las tesis respecto a lo que suponía cada uno de los abismos a los que se asomaba la Europa de los años treinta y cuarenta.
Pese a que sus ideales estaban más cercanos a las concepciones libertarias de la Segunda República que al dogmatismo férreo de la dictadura franquista, el periodista sevillano nunca dejó que sus sentimientos nublaran el bosquejo de la realidad circundante; la cual contaba a través de sus artículos, crónicas y entrevistas. De esta manera, sus textos han quedado como testimonios fieles y verosímiles de un tiempo violento y cargado de destrucción, donde la libertad de expresión y de pensamiento sufrieron una de sus épocas más crudas.
Tras disfrutar de Obra completa, resulta más claro establecer una distancia insalvable entre el periodismo de salón y servil que ejecutan muchas estrellas mediáticas que acuden a las tertulias televisivas y radiofónicas en la actualidad, con el periodismo comprometido de un implacable maestro en el arte de informar, como siempre será Manuel Chaves Nogales.
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