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Liam Neeson encarna al escurridizo y misterioso hombre que propició la información para derrocar al gobierno de Richard Nixon a mediados de los años setenta, en el filme The Silent Man.
El protagonista de la saga Venganza da vida a Mark Felt: el antiguo agente del FBI que se convirtió en la fuente determinante para la investigación llevada a cabo por Bob Woodward y Carl Bernstein, ambos redactores del Washington Post.
Peter Landesman (La verdad duele) dirige a Neeson en este singular biopic, donde comparte títulos de crédito con Diane Lane, Marton Csokas, Maika Monroe, Julian Morris y Josh Lucas, entre otros.
Cuando Vanity Fair publicó en 2005 la confesión del propio William Mark Felt, asumiendo que él era el popular Deep Throat (Garganta Profunda), acabó oficialmente uno de los secretos que más conjeturas habían levantado entre los escándalos políticos a nivel planetario. No en vano, sus declaraciones y documentos ayudaron a los periodistas Bob Woodward y Carl Bernstein a airear el mayor pufo de escuchas ilegales (conocido como el Caso Watergate) propiciadas por la Casa Blanca y el FBI. Asunto que levantó del Despacho Oval al poco carismático Richard Nixon, un 8 de agosto de 1974.
Nada más conocerse la identidad de la fuente oculta (de quien llegó a sospechar incluso el entonces director del FBI, J. Edgar Hoover), los cabos sueltos cobraron sentido, en una de las corrupciones más laureadas de la historia de Estados Unidos.
En el momento en que Alan J, Pakula estrenó su película Todos los hombres del presidente (dos años después de la dimisión de Nixon), la identidad de Garganta Profunda no era más que un cúmulo de suposiciones; motivo por lo que en el filme este personaje aparece siempre entre sombras y sin asociaciones directas, con el rostro del convincente Hal Holbrook (actor que físicamente se parecía un poco a Felt)
El tiempo transcurrido y las revelaciones vertidas han hecho que Peter Landesman lo haya tenido mucho más fácil que Pakula; ya que este pudo escribir el guion de The Silent Man con la figura de Mark Felt, como el confidente activo que dio veracidad a la trama que derrocó a la administración de Nixon.
Apoyado en las autobiografías editadas por el propio Felt, y los numerosos archivos sobre su manera de ser y de comportarse, el responsable de La verdad duele elabora una cinta de ambiciosos toques introspectivos, en la que la figura del antiguo hombre de confianza de Hoover presenta tantas certidumbres como puntos insondables; y donde los grises toman el discurso vivencial del ex Director Asociado del FBI (cargo que abandonó en 1973).
LIAM NEESON Y SUS CONTACTOS CON LA PRENSA
Visiblemente cambiado para convertirse en Felt, Liam Neeson adquiere los tics y las formas de un universitario de Idaho, el cual siempre quiso volar alto.
Desde sus comienzos como asesor de un senador de los Estados Unidos, el entonces joven licenciado en Derecho soñaba con codearse con la jet set del país de las barras y estrellas. Una carrera hacia las alturas que Felt planificó incluso en su faceta sentimental, al casarse con una chica de su Idaho natal, con la que compartió estudios en la universidad.
Agente contra el crimen organizado, especialmente seleccionado para el FBI por J. Edgar Hoover,, el marido de Audrey Robinson fue honrado con múltiples cargos de responsabilidad, en la agencia en la que triunfó Eliot Ness. Pero MF se sorprendió incluso a sí mismo, cuando decidió denunciar con el salvavidas del anonimato el tema de las escuchas ilegales propiciadas por el Gobierno, en sus numerosos encuentros con el periodista Bob Woodward.
No obstante, tras la caída de Nixon, la carrera de Felt entró en una espiral descendente, que acabó con el legendario Deep Throat en el banquillo, acusado de atentar contra los derechos civiles de ciertas personas que se creían asociadas con los miembros de Weather Underground (organización a la que se investigaba por actividades terroristas).
Peter Landesman construye con los ingredientes descritos un completo arco sobre la psique de uno de los hombres más buscados por los medios de comunicación de USA, en los años setenta. Y lo hace con la presencia casi intimidante de un Liam Neeson con ansias de mostrar la vulnerabilidad de un tipo deformado por sus metas profesionales, al que la frágil valentía de sus testimonios frente a Woodward le dio un acceso de moralidad necesaria.
Diane Lane (como la esposa de Felt), Marton Csokas (La deuda), Maika Monroe (La quinta ola), Julian Morris (Cry Wolf) y Josh Lucas (Poseidón) acompañan al protagonista de La lista de Schindler en este retrato agrio y supuestamente certero, que esboza la apariencia espectral de un Deep Throat por fin de carne y hueso.
