Pet Shop Boys y su punto caliente
El dúo británico lanza a la venta Hotspot (x2 Kobalt Label Services): un álbum plagado de ritmos discotequeros, y letras abiertamente hedonistas.
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Pet Shop Boys regresan a la actualidad discográfica con un trabajo al más puro estilo de Neil Tennant y Chris Lowe. Y el resultado es una obra en la que las mezclas y los efectos de sonido toman el protagonismo absoluto, mientras la voz inconfundible y flemática de Tennant deja constancia de su afición a disfrutar de los placeres existenciales, sin pernoctar demasiado sobre la faz de situaciones turbulentas o deprimentes.
Hotspot (x2 Kobalt Label Services) es, según los parámetros expuestos, un vehículo para degustar de cada uno de los momentos que se presentan a lo largo de los días, y que se circunscriben -según Tennant y Lowe– al amor de pareja, a las soledades surcadas por cromatismos esperanzadores, o a la determinación a asir con fuerza las eternidades futuras y las debilidades presentes.
La colaboración del dj y productor Stuart Price (por cuyas manos y consejos han pasado algunos de los discos de The Killers y New Order) da alas a un álbum que rezuma accesos de electrónica luminosa y envolvente, alicatada por atmósferas inspiradoras y utópicas; donde las preocupaciones quedan en el exterior de la figurada sala de dancefloor, que diseñan las líricas del exitoso dúo isleño.
Los diez cortes de los que consta el decimocuarto Cd y vinilo de los autores de West End Girls se suceden sin tregua a lo largo de una cuidada escenificación a lo Fiebre del sábado noche, aunque ubicada sobre las ondas elitistas de los clubes musicales propios del tercer milenio (urbanos y desenfadados).
PET SHOP BOYS NO CEDEN EN SU DEDICACIÓN AL SYNTH-POP
Neil Tennant y Chris Lowe siempre han sido una pareja coherente desde el punto de vista artístico, nunca dada a experimentos destinados a modificar su genética creativa, Una cadena de cromosomas enérgicos y delirantes, perfilada a base de melodías pensadas para alcanzar éxitos multitudinarios .
Sobre semejantes coordenadas creativas, Pet Shop Boys han conseguido elaborar una trayectoria deslumbrante, imperecedera, e incapaz de agotar sus aportaciones new wave; alojadas con inteligencia dentro de un modus operandi en el que los autores de Let To My Own Devices son los auténticos líderes.
Década tras década, los hits han coronado cada uno de los trabajos de “los chicos de la tienda de mascotas”, y Hotspot no es una excepción a la regla. Pese a que el álbum fue presentado en sociedad hace escasamente una semana, este disco ya cuenta con singles tan coreados y seguidos como Dreamland (donde colabora el trío Years & Years) y Burning the Heather (para el que T y L han contando con el talento guitarrero de Bernard Butler, del grupo Suede).
Sin mayores alardes que los que les otorga su sentido perfeccionista de la electrónica supeditada a los ritmos poperos, Pet Shop Boys entienden Hotspot como una invitación multicromática a pasárselo bien, sin importar los acontecimientos desilusionantes que ofrecen las realidades enfermizas (ya sea por el Brexit, o por el ascenso de la ultraderecha en Europa y el resto del planeta).
Del inicial Will-o-the-Wisp al concluyente y desafiante Wedding in Berlin, la decena de tracks que contiene el nuevo trabajo de Tennant y Lowe tratan de la necesidad de esperar milagros, y de la vitamina que permite la permanencia juvenil y rítmica contra viento y marea; como si el mundo avanzara al compás de los acordes proteicos de los sintetizadores, y se pudieran olvidar las penas y los sinsabores con la simple evocación de sueños eléctricos.
Todo para alcanzar el “punto caliente” de los abandonos psicodélicos y hedonistas.
Nota: Pet Shop Boys tienen previsto actuar en el Bibao BBK Live 2020, el 9 de julio.
