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Morrissey reclama un planeta mucho más justo en su décimo trabajo sin The Smiths, titulado “World Peace Is None Of Your Business” (el cual sale a la venta el próximo 15 de julio).
Futuros esquilmados con las cuchilladas del paro crónico, falta de esperanza colectiva, niveles de pobreza no muy alejados de los conceptos dickensianos, clases adineradas cada vez más protegidas por los jueces y los gobiernos, prestamistas de la especulación vistos como héroes mediáticos del concierto social, políticos sólo interesados en lucrarse, tráfico de influencias alimentando los pilares espectrales del capital…
El mundo se ha convertido, en el siglo XXI, en un lugar escasamente apetecible e inhóspito: un planeta moribundo en esencias vitales, que no se inmuta frente a las viles acciones de sus dirigentes, apoltronados encima de sus cojines de papel moneda, y beneficiados -en su mayoría- por el abuso del nepotismo dictatorial.
Ese universo malsano es al que clama -desde la hondura de su voz de barítono- Morrissey, en el que es el décimo álbum de su carrera como solista: World Peace Is None Of Your Business (Harvest Records/ Capitol).
12 cantos de amargura y desesperación, en los que no existen distinciones de raza, credo, nacionalidad o condición personal.
Comunidad rítmica donde todos los seres humanos están ingresados en el mismo hospital de convalecientes depresivos; afectados por una terrorífica enfermedad moral y ética, que encadena su existencia.
MORRISSEY ELEVA SU PROTESTA
Ante un sistema de desigualdades aceradas como el radiografiado, Steven Parker Morrissey (Dawyhulme, Lancashire, Inglaterra, 1959) compone un puzle poético, dentro del que late el corazón apasionado de un cruzado de convincentes propósitos.
Un personaje transmutado en soldado del ejército de las denuncias carnales, simplemente equipado con las declaraciones a trino sincero y esforzado de su lírica.
En definitiva, un militar en avanzadilla directa en pos de reclamar un espacio de mayor comodidad para los hombres, mujeres y niños en completa desasistencia.
El cinismo con el que parece haberse disfrazado la política del tercer milenio asfixia al hombre contemporáneo de cualquier patria, y así lo deja patente el ex vocalista de The Smiths, subido a los lomos de trovas tan lapidarias y realistas como World Peace Is None Of Your Business; I’m Not A Man; Earth Is the Loneliest Planet (sin duda, una de las composiciones más trágicamente bellas de las que completan el disco); y la irónica Staircase At The University (verdadero mazazo al plan educativo estimulado por el gabinete de David Cameron).
Los doce (re)cortes que redacta el antiguo compañero de Johnny Marr, Andy Rourke y Mike Joyce no gozan de los titulares efectistas con los que la Prensa suele alumbrar las opiniones masificadoras, sino que éstos reclaman la reflexión de los espíritus perseguidos por la miseria, la comprensión de los que se preguntan constantemente si de verdad se puede confiar en una justicia universal, digna y determinante.
Dentro de esa agrupación de pensamientos enlazados, destacan por su calor creativo -con sus aguerridos estribillos arrancados a las confesiones en salas oscuras y soledades sulfurosas – las songs Istanbull y The Bullfighter Dies (donde el monólogo que se marca Morrissey es de los que conviene escuchar en más de una ocasión).
Después de tanta filosofía implícita, World Peace Is None Of Your Business metamorfosea sus surcos en una obra necesaria, perteneciente por derecho propio a ese mundo repleto de promesas incumplidas, al que ataca sin fisuras desde el escenario del arte callejero.
Infierno terrenal donde lo único válido para mantenerse en pie es la sinceridad de la palabra, únicamente ataviada con los abalorios de la música y el viento.
Todo para encarar un presente que hereda los vicios de las civilizaciones precedentes; tiempo que Morrissey concita con absoluta crudeza.
Universo árido donde el intérprete criado en Manchester tiende la mano a los marginados, a los desprotegidos, a los engañados por los falsos mensajes, y a los que aún buscan alcanzar utopías como la de la paz planetaria.
Extracto de “The Bullfighter Dies“, OnMorrisseyVevo en youtube
Más información en http://www.morrissey-solo.com
