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Terence Davies estrenará el próximo 22 de julio, en la cartelera española, la adaptación de la célebre novela titulada Sunset Song.
La obra es un clásico de la literatura escocesa, e integra su temática en el género del costumbrismo rural de principios del siglo XX.
El filme compitió en la 63 edición del Festival de Cine de San Sebastián, dentro de la Sección Oficial.
La tierra donde nació Sir Walter Scott es una inmensidad salvaje y exigente, en la que es posible lucir costras de desencanto a la caída del día.
Lejos del romanticismo musculoso de los highlander (que tanto encandilan a las narradoras estadounidenses), los paisajes más allá de la Muralla de Adriano entonan los gritos ensordecedores, de los que aguantan las embestidas explosivas de la naturaleza en su estado más descarnado. Unos ataques climáticos que agrietan el carácter, envilecen la mirada y atornillan los pilares de la amargura.
Tales sensaciones de rigideces genéticas son parecidas a las que reflejó el escritor Lewis Grassic Gibbon en su trilogía A Scots Quair, que comenzó en 1932 con el impactante retrato familiar contenido en las páginas de Sunset Song.
No se puede decir que la prosa del writer nacido en Aberdeen sea amable, ni siquiera porosa a un poco de ternura voluntaria; pero sus palabras destilan el poso enérgico de las realidades rocosas, especialmente verosímiles en la agreste existencia perdida en los páramos norteños de principios del siglo XX.
El cineasta Terence Davies confiesa que siempre ha tenido una clara debilidad por el trabajo de Gibbon, el cual guarda ciertas similitudes afectivas (aunque en el caso del escocés con muchos menos puntos de fuga que en los libros del inglés) con el costumbrismo desarraigado del genial Thomas Hardy.
Y, dentro de la producción del inventor del Estado de Kinraddie, Sunset Song viene a ser como una obsesión de fulgor intenso en el panorama creativo del director de The Deep Blue See.
TERENCE DAVIES FOTOGRAFÍA LOS CAMPOS
A lo largo de 135 minutos de metraje, el responsable de La biblia de neón se encarga de ensamblar la historia de Chris Guthrie con los mimbres de las películas británicas de paisajes sublimados.
Con semejantes intensiones es como el isleño viste los escenarios que agitan la existencia de la protagonista, así como la de los conviven con ella. Desde las sinfonías agónicas de la granja paterna, a los himnos crepusculares de los horizontes segados por los futuros espectrales.
Todas estas localizaciones adquieren en la cinta un interés más profundo que el meramente decorativo, a través de la excelente fotografía de Michael McDonough, quien recrea el objetivo de la cámara con las tonalidades cambiantes de los páramos de belleza inmaculada y ponzoñosa.
Ahí es donde transcurre la acción de la movie, que sigue con fidelidad las tristezas y alegrías de la joven Chris Guthrie (Agyness Deyn).
La chica siempre ha tenido una existencia raspada con papel de lija. Cuando aún era una niña, su madre asesinó a los gemelos a los que acababa de dar a luz. Sin capacidad todavía para comprender la atrocidad cometida por su mother, la protagonista se hace cargo de la granja de su padre, John Guthrie (Peter Mullan). Al lado de éste y de su hermano mayor Will (Jack Greenlees), Chris saca adelante la explotación rural, aunque en su labor tenga también que mantener a raya los accesos incestuosos y maltratadores de su progenitor.
Tras la muerte del señor Guthrie y la marcha de su hermano a Argentina, la protagonista conoce en su soledad al granjero Evan Tavendale (Kevin Guthrie), y se casa con él. Sin embargo, después de un tiempo breve de cierto sosiego en común, el estallido de la Primera Guerra Mundial dará nuevamente al traste con las esperanzas de felicidad en la ya joven madre.
Davies narra todos estos acontecimientos con la tierra en calidad de punto de apoyo discursivo, como elemento esencial para marcar el desarrollo del punzante argumento: solución que aporta a los fotogramas un carácter realmente agresivo y atrayente.
Arreglos audiovisuales que corren parejos a como Grassic Gibbon pretendió que fuera su novela, hace más de ochenta años.
Tráiler oficial de Sunset Song, por Magnolia Pictures & Magnet Releasing
