Gerard Butler encabeza el elenco artístico de Keepers: un thriller de naturaleza psicológica, que dirige el danés Kristoffer Nyholm (Taboo).
La historia se basa en los hechos ocurridos en 1900 en las Islas Flannan, cuando los responsables del faro desaparecieron sin dejar rastro.
El nórdico Ólafur Darri Ólafsson, y los británicos Peter Mullan, Gary Lewis y Ken Drury completan el reparto del filme.
Al oeste de Escocia hay unas islas en las que hasta las gaviotas vuelan con precaución.
Incrustadas en el conglomerado del archipiélago de Las Hébridas, esta porción de tierra en medio del mar posee las atmósferas extrañas de los lugares fantasmales, surcados por bancos de niebla y verdores desasosegantes.
Un decorado de silenciosos atardeceres e inquietas nocturnidades, donde el faro diseñado por David Alan Stevenson ejerce una presencia casi demoniaca.
Semejante paisaje representa el leitmotiv escénico de la nueva película del highlander Gerard Butler: una aventura de curso misterioso e imaginativo, en la que la realidad pierde peso para acceder a un cosmos de insinuaciones tormentosas, y de laberintos emocionales.
Un sinfín de mecanismos regados en suspense inquietante, donde el danés Kristoffer Nyholm desborda su inventiva, en pos de provocar la reacción de los espectadores.
GERARD BUTLER LUCHA CONTRA LOS FANTASMAS
El intenso frío matutino de las Islas Flannan golpea con fuerza el curtido rostro de un Gerard Butler algo pasado de kilos, mientras el actor presta su musculosa masa corporal para dotar de vida al enérgico James. Este personaje fue uno de los individuos que desaparecieron en 1900, mientras intentaba sobrevivir en el faro de 23 metros que corona la citada formación terrosa.
Cuando alguien pasea por los senderos escondidos de las Flannan, existe la sensación extraña de ser observado por miradas que no son perceptibles por el ojo humano. Es como si un ser indefinido manipulara la razón, para convertir a sus víctimas en meros objetos a los que destruir.
Esta idea es la que persiste en el guion escrito por Joe Bone y Celyn Jones, un libreto donde el terror psicológico moldea a los individuos que componen el argumento, y que evoluciona según va calando la soledad en los huesos de los protagonistas.
Atractiva y descorazonadora, la trama de Keepers está concebida como un viaje a los abismos de la locura; y allí desarrolla un discurso malsano, en el que la violencia medioambiental está enfatizada hasta límites insospechados.
Dentro del organigrama dramático pensado por Nyholm, Gerard Butler ha construido una interpretación de salvajismo casi primitivo, siempre secundado por tipos tan habituados a trabajar en movies de corte parecido como Peter Mullan (Session 9) y Ken Drury (Juego de tronos).
Juntos elaboran un paisaje de comportamientos extremos, que ayuda a entender lo que sucedió en las islas Flannan hace ahora más de 100 años.