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Woody Allen introduce su cámara en un parque de atracciones ubicado en la zona costera de Nueva York, para elaborar un drama pasional titulado Wonder Wheel.
La película, ambientada en los coloridos años cincuenta, narra el affaire sentimental mantenido entre la esposa del operador del tiovivo y la noria, en la mencionada zona de recreo de Coney Island, y un atractivo salvavidas.
Kate Winslet encabeza el elenco plagado de rostros conocidos, entre los que destaca la presencia de Juno Temple, Justin Timberlake, James Belushi y Debi Mazar.
Aunque no llegó a tiempo para el Festival de Cine de Venecia (cita habitual para la presentación internacional de los filmes del director responsable de Manhattan), Woody Allen ha podido completar su última producción de cara a la celebración del 55 Festival de Cine de Nueva York, que tendrá lugar a partir del 14 de octubre de 2017.
Una elección acorde con el escenario principal de esta obra del imaginativo cineasta, la cual transcurre en las extensiones fantasiosas de un territorio de Coney Island surcado por atracciones diversas, y coronado por una inmensa noria nominada Wonder Wheel (que da título a la película).
Después de probar suerte en la televisión online con la serie Crisis in Six Scenes, Allen ha confiado nuevamente en Amazon Studios para grabar la caída a los infiernos del pecado lujurioso de una mujer casada; hastiada por una existencia sin alicientes, y esclavizada por los sueños escasamente ambiciosos de su esposo y de una hija que la ignora.
Wonder Wheel juega con esas emociones de alcoba y tocador, mezcladas con los deseos prohibidos que experimenta la protagonista: esa dama de afectos infieles bautizada como Ginny, y que aparece en el filme con el físico de la camaleónica Kate Winslet; en lo que ha sido una caracterización realmente “estresante y angustiosa“, según las palabras pronunciadas por la actriz británica.
WOODY ALLEN, TRAS LAS FALDAS DE VUELO
Un aroma a Niágara, aunque sin la evidente carga sensual y perversa que imprimió Marilyn Monroe en la citada movie, impregna cada uno de los fotogramas de Wonder Wheel, como si construyeran un destino ilusorio, marcado por las esencias aguardentosas de un El cartero siempre llama dos veces en plan feriante.
Tales elementos emergen impetuosamente en el guion elaborado por Woody Allen, debido sobre todo a la determinación del director neoyorquino por mantenerse cercano al clasicismo de los géneros cinematográficos. Un asunto que otorga habitualmente un plus de interés a los títulos de WA, más allá de las posibles virtudes o defectos de los mismos.
Por dedicación y cuidado, el autor de Comedia sexual de una noche de verano parece haber cocinado Wonder Wheel con un mimo especial. Dato que queda confirmado con la contratación del veterano director de fotografía Vittorio Storaro, quien se ha encargado de iluminar el universo neurótico y opresivo en el que están carbonizados los anhelos de Ginny y de su familia.
Con los potentes focos pigmentados del maestro italiano, el argumento adquiere las tonalidades angustiosas de los falsos fondos de papel celofán. Alternativa que hunde la cinta de Allen dentro de los laberintos melodramáticos, inmortalizados por genios del celuloide como Douglas Sirk.
Semejante esquema formal ha permitido a Kate Winslet enfrentarse a un personaje (el de la atormentada Ginny) que ha exigido a la isleña sumergirse en un ejercicio altamente sensitivo, el cual ha dejado exhausta -a tenor de sus declaraciones al respecto- a la estrella de Titanic.
Un trabajo de riesgos asumidos en el que KW ha recibido la ayuda de compañeros del calibre de la inglesa Juno Temple (Expiación), el cantante Justin Timberlake (Con derecho a roce), James Belushi (Danko: Calor rojo) y Debi Mazar (Uno de los nuestros), entre otros.
Nota.- Wonder Wheel tiene previsto su estreno en España para el próximo 1 de diciembre de 2017.
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