0
0
El cincuenta por ciento de Oasis, Liam Gallagher, llega a España como líder de una nueva banda cargada de esencias pretéritas. Madrid (La Riviera) y Barcelona (Razzmatazz) son las ciudades por las que el ex de Patsy Kensit paseará las canciones de BE (el segundo disco en la carrera de Beady Eye).
La música contemporánea no suele hacer amigos con carne de perdurabilidad. Una máxima que se hace más patente si los aspirantes a iconos no cuidan de su particular sueño por subsistir.
La filosofía del consumo rápido y la vertiginosa alternancia de las modas sinfónicas han dejado por el camino a demasiadas bandas y solistas que prometían grandes gestas.
Oasis fue una de esas formaciones que se quedó en el sendero de lo que pudo haber sido y no fue. Aunque, en el caso de los muchachos de Manchester, las causas del desastre vinieron más bien por problemas de actitud entre sus jefes consanguíneos, más que por falta de tirón comercial o cambio de gusto en las audiencias.
Noel y Liam no paraban de tirarse los trastos a la cabeza (con o sin Prensa delante), y la disolución del matrimonio profesional fue una consecuencia más que comprensible.
Pero la desaparición de la bandera del Bristish Pop bautizada como Oasis no trajo consigo el desgaste creativo de sus cabezas pensantes.
Y por ese motivo apareció en el panorama Beady Eye.
En busca de los orígenes
La citada montaña rusa de emociones que mantuvo a Oasis en la cresta de la ola mediática embarcó a Liam y a Noel en una desconexión con sus raíces artísticas; algo que el pequeño de los Gallagher ha intentado recuperar con el alumbramiento del grupo que actúa hoy en Madrid (a fecha de 12 de febrero de 2014) y mañana en Barcelona (13 de febrero).
Mucho más calmado que en sus años de caprichosa music star, William John Paul “Liam” Gallagher (Manchester, Inglaterra, 1972) recala en la Piel de Toro con un puñado de temas que no esconden su especial sincronía con el portentoso legado de los trovadores de Wonderwall y Morning Glory.
Teloneados por Mucho (en la capital) y los enérgicos Stay (en la Ciudad Condal), Beady Eye darán buena cuenta de los dos únicos álbumes que componen su por ahora breve discografía. Aunque, con casi total seguridad, algunas de las tonadas más célebres de Oasis atronarán igualmente en los recintos, siempre aliñadas con la atmósfera de los recuerdos entusiastas.
Precisamente, esta dependencia del pasado es uno de los sambenitos más habituales que se le suele achacar al team capitaneado por LG.
No obstante, sería injusto no reconocer a los BE la valentía de plantear un proyecto tan arriesgado y voluntarista, destinado a reivindicar con inéditas líricas la esencia de los pentagramas que reinaron en el mundo a finales del siglo XX.
Cuando Liam, Jay Mehler (el guitarrista de Kasabian toma el testigo del ausente Jeff Wootton), Paul “Barehead” Arthurs, Andy Bell y Chris Sharrock suban al coso a eso de las 21:30 horas en La Riviera de Madrid y en la Sala Razzmatazz de Barcelona defenderán con verosimilitud su historia aún escasamente contada.
Y lo harán los acordes de un adictivo cóctel, que suma los ingredientes de su más que sorprendente disco de presentación titulado Different Gear, Still Speeding (álbum en el que se incluyeron hits bastante potentes y que hay que recuperar, como Millionaire), y el licor psicodélico del reciente BE (once letras lubricadas con la ironía de alguien que se siente cual Ícaro, continuamente con el temor de que el sol queme definitivamente sus alas enceradas).
A tenor de lo ocurrido, se puede asegurar que Oasis ha pasado a mejor vida (a menos que no se anuncie una reconciliación sincera entre Liam y Noel); pero, a falta de pan, buenas son tortas.
Sentencia popular que sirve para explicar la existencia de Beady Eye, sobre todo de cara a los seguidores de los autores de Rock’n’ Roll Star.
Entendida como una vía de escape para que esa legión de fans rememore los pletóricos años noventa, la conformación del grupo de Liam tiene asegurado un nicho para su crecimiento y evolución.
Más información en http://www.ticketmaster.es
