The Band’s Visit arrasa en los Tony Awards
La obra, dirigida por David Cromer, consiguió diez de los once galardones a los que estaba nominada.
0
0
The Band’s Visit no cuenta con el glamur espectacular de musicales tan coloristas y estelares como My Fair Lady y Cats; pero eso no ha sido un obstáculo para que la historia de ocho músicos egipcios, perdidos en Israel, se convirtiera en la gran triunfadora de la edición 72 de los premios Tony de teatro.
La gala del pasado domingo, celebrada en el mítico Radio City Music Hall neoyorquino, pasará a la historia por el explosivo discurso pronunciado por Robert de Niro contra el presidente Donald Trump; aunque, desde el punto de vista artístico, será recordada como la noche en que un montaje de presupuesto limitado -como es The Band’s Visit– logró hacerse con los “seis grandes” de la escena estadounidense.
The Atlantic Theatre Company siempre confió en las posibilidades del argumento de la ópera prima elaborada por el cineasta israelí Eran Kolirin, el cual sirvió para grabar la homónima película en la que se basa el ahora exitoso musical.
David Cromer (director de la obra) y David Yazbek (responsable de las partituras) son los principales artífices y valedores de la conversión rítmica de esta trama de talante costumbrista, que mezcla con soltura elementos de comedia y de drama; y en la que el protagonismo lo toma la solidaridad entre individuos anónimos, adscritos a diferentes culturas y países.
La sencillez formal nutre cada uno de los números que conforman el libreto de The Band’s Visit: una honesta conexión lírica que transmite un mensaje de comprensión deseable entre israelíes y árabes, siempre auspiciada a través de notas que enfatizan la humanidad reinante.
THE BAND’S VISIT Y SUS CONCIERTOS LLENOS DE EMOCIÓN
La trama tiene lugar en 1996, cuando la banda llamada The Alexandria Ceremonial Police Orchestra aterriza en Tel Aviv, invitada por el centro de cultura árabe llamado Petah Tikva.
El grupo orquestal, compuesto por ocho oficiales de origen egipcio, encarga al joven Haled comprar los billetes; pero una equivocación en el nombre del destino hace que los hombres y sus instrumentos acaben en la ciudad de Beit Hatikva, en el desierto de Negev.
Allí, los músicos comenzarán a relacionarse con los lugareños, que les transmiten un especial sentimiento de amistad; lo que dará pie a actuaciones realmente emotivas y sorprendentes.
La versión musical del guion ideado por Eran Kolirin está plagada de cortes y tonadas, que ofrecen a los espectadores un toque ameno y cercano. Esto ha contado de manera determinante, para que el montaje albergado en el interior del Ethel Barrymore Theatre se alzara con el máximo galardón de los Tony Awards en su categoría: el del Mejor Musical de 2017.
Composiciones de singular efectismo, como el ilustrativo Waiting; el confesional It Is What It Is; el divertido Omar Sharif; y el participativo The Concert hacen que The Band’s Visit eleve la factura sentimental de un libreto imaginativo y contagioso.
Esto también favorece a que el elenco interpretativo (encabezado por los también premiados Katrina Lenk, Tony Shalhoub y Ari’el Stachel) se sienta sumamente cómodo, en cada uno de los emotivos personajes que conjuntan el argumento.
Cada noche, The Alexandria Ceremonial Police Orchestra ofrece su discurso de pentagramas enlazados, entre Broadway y la octava avenida; pero su mejor actuación la efectuó el pasado domingo en el Radio City Music Hall, lugar donde se coronan los eternos divos de los sueños de bohemia e ilusión.
Más información, entradas y horarios en
http://www.shubert.nyc/theatres/barrymore/
Tráiler de The Band’s Visit, por The Band’s Visit
