Arabella seduce al Real
La ópera romántica de Richard Strauss abrirá la temporada de 2023 en el Teatro Real, con su estreno propuesto para el 24 de enero. Christof Loy escenifica por primera vez en la Villa y Corte esta historia bucólica y de amores contrariados, con la soprano de origen polaco Sara Jakubiak como una de las principales atracciones artísticas.
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Arabella surgió en 1927 de la prolífica inspiración del compositor muniqués Richard Strauss, como una especie de continuación espiritual de El caballero de la rosa (el éxito que cosechó el creador teutón en 1910).
El asunto de la escritura parecía aparentemente sencillo: pensar en una ópera a modo de sainete aldeano y aristocrático, en el que los protagonistas se debatieran en intrincados juegos amorosos, tintados por situaciones sorpresivas, e ideados para alejar a las parejas consideradas como las adecuadas dentro del tablero consistente en triunfar en el objetivo de sanar los tormentos del corazón.
A tal efecto, Strauss contactó con su letrista de confianza desde Elektra, Hugo von Hofmannsthal, para que diseñara un engranaje de emociones cercano a las piezas de William Shakespeare, aunque con el sello centroeuropeo del gusto austriaco y alemán por las partituras estilizadas, y emulsionadas por repartos corales y costumbristas.
Sin embargo, el proyecto sufrió una serie de contratiempos inesperados. Primero, Von Hofmannsthal falleció de un ataque cardiaco dos años después de comenzar con el liberto, sin haber terminado la revisión de los dos últimos actos. A esto se sumó el despido de Fritz Busch como director de la Straastsoper de Dresde, que era donde Strauss tenía apalabrado el estreno.
Todos estos datos acompañan a la leyenda de Arabella, cuyo curso narrativo y melódico verá la luz en el Teatro Real madrileño desde el próximo 24 enero, y a lo largo de siete funciones. Una oportunidad para contemplar el universo postromántico que Richard Strauss horneó con sumo detallismo, y el cual coincidió lamentablemente con el ascenso de Adolf Hitler al poder, lo que marcó el devenir puntual de este ejercicio divertido de enamoramientos bucólicos.
El director germano Christof Loy (Lulu) regresa al interior del Teatro Real para dotar de vida a un espectáculo de luz y de color, arropado por un entramado elegante y atrayente, en el que el coreógrafo Thomas Wihelm y el iluminador Reinhard Traub trasladan a los espectadores a la Austria decimonónica y campestre.
Un viaje sin escalas, que lidera la profunda voz de la soprano de origen polaco Sara Jakubiak, quien encarna a la bella y decidida Arabella: la hija mayor del conde de Waldner, la cual está empeñada en casarse por amor y no únicamente por dinero.
ARABELLA ES UNA EMOCIONANTE COMPOSICIÓN OPERÍSTICA EN TRES ACTOS
Los tres actos que nutren el libreto de Arabella definen la evolución temática de un relato de voluntario escapismo, con respecto al mundo en el que fueron escritos.
En 1927, Alemania aún vivía en la incertidumbre abismal de la República de Weimar, mientras los nazis y Adolf Hitler tejían su telaraña para asaltar la política nacional a base de populismo racial, terror mafioso y acciones violentas.
En medio de semejante panorama existencial, Richard Strauss quería ante todo ofrecer a los espectadores una realidad amable y esperanzadora, enclavada en el costumbrismo aristocrático propio de la nación de Sissi y los valses. Un vehículo teatral para soñar con bellas damas y con heroicos caballeros, propensos a defender su pasión amorosa frente a los obstáculos de una sociedad cambiante.
Sin embargo, diversos accidentes hicieron que el estreno de Arabella se retrasara del inicial 1929, hasta el 1 de julio de 1933: fecha que coincidió con la plena efervescencia de las elecciones federales de marzo de 1933, y con el nombramiento de Adolf Hitler como canciller de Alemania, producido el 30 de enero de ese mismo año. Esto provocó que el interior del Staatstheater de Dresde estuviera repleto de los camisas pardas de Ernst Röhm, quienes no eran muy seguidores del romanticismo tardío de Richard Strauss.
Los ecos de un pasado tan turbulento quedarán un tanto olvidados en el interior del Teatro Real en este siglo XXI, cuando la soprano Sara Jakubiak luzca con sutileza los cromáticos ropajes de Arabella.
La cantante germano-polaca se subirá estimulada por el espíritu de Richard Strauss al escenario del templo escénico de la Villa y Corte acompañada del imaginativo Christof Loy, y de los directores musicales David Afkham y Jordi Francés. Una actuación esperada por los amantes del bel canto, que ansiaban disfrutar del talento de una de las estrellas emergentes de la ópera moderna más admiradas en la actualidad, y que ya ha mostrado sus virtudes profesionales en lugares tan emblemáticos como la Royal Opera House de Londres.
Nota: Arabella estará en el Teatro Real de Madrid desde el 24 de enero de 2023, al 12 de febrero de 2023.
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