Russell Crowe reta a Satán
El intérprete neozelandés se convierte en el padre Gabriele Amorth, dentro del film "El exorcista del Papa". La película recrea la azarosa y misteriosa actividad de este luchador incansable contra El Maligno, al que se le atribuyen cerca de 100.000 ceremonias de expulsión de los espíritus diabólicos, desde su cruzada iniciada durante el papado de Juan Pablo II.
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Russell Crowe ha sido combatiente en la arena romana (Gladiador), el doctor Jekyll y su reverso Hyde (La momia), defensor de los más desfavorecidos (Robin Hood) y policía duro y con malas pulgas (L.A. Confidencial); pero le faltaba vestir la sotana y enfrentarse a Belcebú y sus acólitos. El actor neozelandés deseaba probar el subidón que debió sentir Max von Sydow, cuando ayudó a expulsar al Ángel caído del interior de una niña tendente a poner a la gente perdida con vómitos de color verde, en El exorcista (William Friedkin, 1973); y la oportunidad le ha llegado con El exorcista del Papa.
El cineasta australiano Julius Avery (Overlord) es el responsable de esta singular obra en formato de celuloide, que narra la siniestra actividad del padre Gabriele Amorth, desde su puesto de exorcista oficial del Vaticano, cargo que recibió de manos de Juan Pablo II, bajo la tutela del sacerdote y también azotador de diablos Candido Amantini.
El guion elaborado por Chester Hastings, R. Dean McCreary y Evan Spiliotopoulos se acerca a los recovecos oscuros de la personalidad de Amorth, quien mostró una actitud inflexible, frente a los supuestos fenómenos sobrenaturales que tuvo que presenciar a lo largo de varias décadas de incruenta batalla contra los espíritus dados a provocar la autodestrucción de sus víctimas.
Avery ha echado mano de la inspiración que le generó la visión como admirador de El exorcista, aunque también ha podido contar con algunos de los elementos litúrgicos que aparecían en el film El rito (Mikel Hafström, 2011). Dos títulos que el cineasta oceánico ha completado con la lectura de los libros escritos por el padre Gabriele Amorth: An Exorcist Tells His Story y An Exorcist: More Stories.
RUSSELL CROWE ENCARNA AL RELIGIOSO QUE LLEGÓ A IDENTIFICAR EL YOGA CON EL SATANISMO
El padre Gabriele Amorth nunca ocultó el gusto que le daba su dedicación a expulsar a los demonios de los cuerpos de sus supuestas víctimas, y lo propagó incluso en diversos medios de comunicación. En algunas de sus entrevistas más singulares, el religioso llegó a considerar El exorcista como una de las movies más cercanas a la realidad que experimentaba en su trabajo, aunque también desdeñó parte de su efectismo audiovisual y algunos de sus trucos de maquillaje. Sin embargo, entre sus confesiones más llamativas estaba la de asociar ciertas posturas del yoga con llaves destinadas a invitar a los íncubos y súcubos a poseer un alma. Afirmación un pelín estrambótica, a la que acompañó un poco más tarde la declaración de que las lecturas de las novelas de Harry Potter potenciaban la inculcación entre los más jóvenes de las tesis infernales y el consiguiente acercamiento al Mal.
Julius Avery no ha querido descartar estos aspectos extraños del comportamiento de Gabriele Amorth, sino equilibrarlos con sus prácticas de lucha sin cuartel contra los demonios que pululan en el medioambiente. Una contienda un tanto difusa y poco clara desde el punto de vista de la realidad palpable, a la que Russell Crowe aporta su mirada granítica y su actitud desafiante.
Dentro del universo de Gabriele Amorth existe un componente de pesadilla voluntaria, conformada en torno a unas creencias férreas, las cuales se alimentaban en muchas ocasiones del delirio colectivo y del dogmatismo a ultranza. Russell Crowe diseña su personaje con las luces y las sombras que marcaron la existencia de este religioso italiano nacido en Módena, en 1925, y fallecido en Roma, en 2016. Un hombre que creyó incluso que el intento de homicidio de Mehmet Ali Ağca contra Juan Pablo II era fruto de una posesión, y a quien le perturbó el caso de Emanuela Orlandi (la joven que desapareció en Roma en 1983, vinculada a macabras fiestas relacionadas con miembros del Vaticano).
Sin duda, y si fallan los salmos, la potente expresión facial y la fisonomía de Russell Crowe ayudarán a atemorizar a los espíritus malignos que anidan entre los fotogramas de El exorcista del Papa. No en vano, el neozelandés es conocido por su árido carácter.
Nota: El exorcista del Papa tiene prevista su fecha de estreno en salas para el próximo 5 de abril de 2023.
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