Nicole Kidman será Scarpetta
La oscarizada actriz nacida en Honolulu (Hawái) es la escogida para caracterizar a la carismática Kay Scaroetta: la perspicaz médica forense, que protagoniza veintiséis novelas de la autora estadounidense Patricia Cornwell. Un personaje que antes que Kidman estuvieron a punto de interpretar Angelina Jolie y Demi Moore.
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Nicole Kidman ha conseguido equilibrar su carrera cinematográfica y sus escarceos televisivos con un acertado compromiso artístico y creativo. Una fórmula que le ha permitido mantener el nivel profesional de manera prácticamente inalterada, a pesar del transcurso del tiempo; y superar con indudable talento selectivo la temible barrera biológica con que las estrellas de Hollywood suelen tener pesadillas sulfurosas; y que está enlazada con el injusto olvido progresivo de su presencia delante de las cámaras, conforme aparecen las arrugas y las canas.
Desde hace algunos años, Kidman ha mantenido un lucrativo idilio con algunas plataformas de visionado en streaming, y eso le ha provisto de proyectos interesantes, necesarios cuando estos escasean en formato de celuloide. Precisamente, el éxito más reciente de la protagonista de Las horas ha sido en una serie televisiva, titulada Roar.
Tales dotes para no modificar sus virtudes dramáticas cuando cambia de medio le han valido a NK la fama requerida para granjearse un poso de atracción, con el que ha imantado a los ejecutivos del mundo audiovisual, tanto de la pequeña pantalla como del séptimo arte. Unos inversores que ven en ella un activo humano capaz de levantar un guion simplemente con su gestualidad mediada por la emoción, y sus marmóreos rasgos físicos; armas que no están al alcance de cualquiera.
Esa naturaleza cambiante en función del rol que debe desarrollar en la escena o en un plató (ya sea en la pantalla grande, en la tele o en el teatro) ha favorecido a Kidman para hacerse con uno de los papeles más perseguidos de las últimas décadas: el de la médica forense Kay Scarpetta. Y lo ha logrado con el beneplácito de Amazon Studios y Blumhouse Television.
La fogueada Elizabeth Sarnoff (Perdidos) es la encargada del guion de Kay Scarpetta (título con el que se ha presentado la aventura televisiva). La trama. pese a que no ha trascendido aún qué libros de Patricia Cornwell abarcará), parece que seguirá el esquema narrativo de Bosch, serie que adaptó ligeramente algunas de las novelas de Michael Connelly, a lo largo de las seis temporadas de las que constó la citada producción.
Lo que sí ha trascendido es que uno de los personajes principales, junto al de Scarpetta, será el de su hermana Dorothy: una mujer casada a los dieciocho años con un millonario bastante mayor que ella, y a la que tiene previsto encarnar la todoterreno Jamie Lee Curtis (Todo a la vez en todas partes).
NICOLE KIDMAN SE HA CONVERTIDO EN LA ACTRIZ PERFECTA PARA DOTAR DE FÍSICO A KAY SCARPETTA
Según las novelas de Patricia Cornwell, Kay Scarpetta es una facultativa nacida en 1954, en la ciudad de Miami, Florida. Una esforzada trabajadora obsesiva que renunció a su puesto como médico jefe del hospital Commonwealth de Virginia, para dedicarse a prestar sus conocimientos como forense de manera privada. Así toma contacto con casos de complicados homicidios en distintos lugar de Estados Unidos y del resto del mundo. Un papel con múltiples facetas atrayentes a las que agarrarse, y que Nicole Kidman sabrá cómo exprimir convenientemente.
En principio, y según lo publicado por Variety, Kay Scarpetta constará de dos temporadas, de ocho episodios cada una; aunque se desconoce si el argumento de la primera de ellas coincidirá con lo narrado en Postmorten (la primera de las entregas de la saga de Scarpetta, publicada en 1990).
Resulta extraño que hasta ahora no exista ninguna adaptación (tanto televisiva como cinematográfica) de la célebre galena de origen transalpino, sobre todo después de comprobar que Patricia Cornwell ha participado con anterioridad en versiones audiovisuales de algunos de sus escritos, como El avispero (Millicent Shelton, 2012) y Patricia Cornwell: El frente (Tom McLouhlin, 2010). Esto responde al mimo con que la autora entiende a Kay Scarpetta, rol que merece -según ella-un guion lo suficientemente potente, como para no decepcionar a los miles de lectores que siguen sus casos impresos.
Una imposición que, a tenor de las palabras de Jamie Lee Curtis, se ha conseguido soslayar con el trabajo de Elizabeth Sarnoff, y la labor financiera de Amazon Studios, Blumhouse Television, Blossom Films y Comet Pictures.
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