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Joseph Fiennes encarna al Rey del Pop, en una alocada comedia británica titulada Elizabeth, Michael and Marlon. La producción narra un figurado viaje por carretera protagonizado por Elizabeth Taylor, Michael Jackson y Marlon Brando, cuando las tres estrellas intentan escapar de Nueva York rumbo a Los Ángeles, después de los atentados del 11-S.
Leyenda mediática o realidad, lo del cantante de Bad respecto al color de su epidermis venía a ser hace unas décadas tema recurrente en programas de televisión y publicaciones amarillistas. Una cuestión bastante polémica que el propio singer procuraba alimentar en cuanto tenía ocasión. Preguntado por ello en el espacio de Oprah Winfrey, el genial artista confesó que le encantaría ver a un actor blanco como alter ego suyo en la pantalla.
Los años transcurridos han querido favorecer el deseo del mítico solista de Billie Jean, empresa que ha recaído en el isleño Joseph Fiennes.
Un proyecto algo delirante de la cadena Sky Arts , titulado Elizabeth, Michael and Marlon, es el culpable de la gesta. Según los responsables del canal ubicado en Reino Unido, la TV movie es una obra destinada a ser incluida en un conjunto de comedias sobre la cultura contemporánea; contexto en el que tienen un peso evidente los apellidos de Jackson, Taylor y Brando.
De esta manera, con el sano propósito de llamar la atención de la industria y de los espectadores, Sky contrató los servicios del efervescente director Ben Palmer (quien acababa de finalizar la última temporada de The inbetweeners) para hacerse cargo de la película, cuya historia cuenta con el ingenioso argumento orquestado por el escocés Neil Forsyth (Bob Servant).
JOSEPH FIENNES BUSCA EL FEELING
Los atentados a las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001 marcan el punto de arranque de esta empresa audiovisual de media hora de duración. Durante esa fecha, y a tenor del libreto elaborado por Forsyth, Jackson se encontraba en el Madison Square Garden neoyorquino, dispuesto a dar un concierto al que iban a asistir sus amigos Elizabeth Taylor y Marlon Brando.
La bestialidad de los ataques terroristas hace, según el guion, que los tres colegas teman por sus respectivas vidas, motivo por lo que toman un coche con el propósito de huir de la urbe del Empire State. El destino que quieren alcanzar es el hedonista escenario de Los Ángeles, pero les separan demasiados kilómetros de distancia. Un recorrido que deparará más de un diálogo disparatado y situaciones de humor al borde de la neurosis, salteados con alusiones a los afectos y las fobias del terceto de iconos del siglo XX.
Los puristas probablemente aducirán que, pese a que no hay datos específicos sobre dónde se hallaban los tres personajes en el citado 11-S, es bastante improbable que todos ellos estuvieran en el lugar donde los sitúa la trama de Elizabeth, Michael y Brando. No obstante, las referencias de hemeroteca son las que menos importan en este ejercicio de sana comedia mediática.
Sin embargo, y para contentar a los fans, no todo está generado por la fantasía del creador de la historia. Forsyth ha escogido a esos protagonistas por la intensa relación que estos mantuvieron a lo largo de su existencia. Michael y Elizabeth era uña y carne, mientras que el cantante siempre declaró una admiración excesiva hacia el trabajo de Brando, a quien llegó incluso pedir parte de su esperma para fecundar el óvulo del que nació su hijo Prince Junior.
En resumen, un cóctel de fantasía y chispa que ha embriagado los sentidos de Fiennes, Stockard Channing (la conocida Rizzo, de Grease, se encarga de poner rostro a Taylor) y del británico Brian Cox (Marlon Brando) a la hora de construir sus sorpresivas caracterizaciones.
La esperada movie verá la luz -si se mantienen los planes- el próximo diciembre de 2016, dentro de la plataforma de Sky Arts. En ese momento, los televidentes podrán comprobar cómo le sienta el cambio de epidermis al tristemente desaparecido singer de Black or White.
Más información en
http://www.sky.com/watch/channel/Sky-arts
