Richard Armitage toca el tambor
El actor británico de "El hobbit" encabeza el elenco interpretativo de "La piel del tambor": una coproducción entre distintos países, cuyo guion está basado en la novela homónima de Arturo Pérez-Reverte. El colombiano Sergio Dow (El día que me quieras) dirige este film de argumento sobrenatural y giros constantes.
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Richard Armitage detenta el porte elegante, casi seductor, con que el escritor Arturo Pérez-Reverte etiquetó al personaje del activo e inteligente Quart. Este investigador, con alzacuellos y trajes impolutos, protagonizó la inquietante y entretenida historia de La piel del tambor: un best-seller ambientado en las calles de Sevilla y editado originalmente en 1995, donde creador del capitán Alatriste exhibió la faz fantasmagórica de una ciudad barroca y peligrosa, plagada de misticismo y secretos ancestrales. Un lugar amenazado por un ente criminal que, en apariencia, escapa de toda comprensión humana, y de cualquier apego al racionalismo deductivo heredado de Arthur Conan Doyle y Agatha Christie.
Tales coordenadas sinópticas, de signo sobrenatural e inquietante, marcan también el guion de la homónima película dirigida por el colombiano Sergio Dow (El día que me quieras), y que ha ejecutado a través de la colaboración entre distintas productoras de diferentes nacionalidades (RTVE y Amazon Studios, entre otras).
Las elocuentes fachadas y callejones de la urbe de La Giralda sirven de potente escenario para esta activa película, protagonizada por un religioso bastante atípico, dentro del arco de la curia vaticana: un seguidor de los métodos de la lógica, aplicados a contextos espirituales que normalmente destilan un claro aroma a fraude y engaño, siempre arropados por una pátina de dogmatismo eclesiástico y reverencial.
El británico Richard Armitage (El hobbit) es el seleccionado para meterse en el cuerpo del imaginativo Quart, caracterización que RA afronta con un sentido romántico y aventurero, lo que tiende a generar una profundidad psíquica realmente sorprendente para tan singular rol.
Semejante opción dramática favorece la concatenación de las numerosas contradicciones, en las que se sume este investigador de la sección de Asuntos Exteriores del Vaticano. Un individuo al que se le presentan constantemente dudas interiores, que ponen en riesgo su fe; sobre todo cuando cuestiona determinadas reglas promulgadas por las altas esferas de la Iglesia de Roma.
RICHARD ARMITAGE SE CONVIERTE EN EL NUEVO QUART
Según el texto diseñado por Arturo Pérez-Reverte, Quart es un hombre atormentado, a quien le despierta cada mañana un pasado atenazado por sus miedos y frustraciones. Un pretérito que dota a su presente de profundos abismos emocionales y sensitivos, que se ven potenciados por el caso que le encargan resolver sus superiores.
La misión de Quart en La piel del tambor tiene que ver con los extraños sucesos acaecidos en una iglesia barroca sevillana del siglo XVII y casi derruida, en la que ha perdido la vida un religioso. El inmueble se erige en el terreno de una excéntrica aristócrata (Amaia Salamanca); y, desde allí, proyecta una espectral sombra de ansia criminal, como movido por una fuerza demoniaca.
El resultado de estas pulsiones se concreta en un laberinto de historias carcomidas por el polvo y el olvido, que el sacerdote protagonista destapa con su especial capacidad para meterse en lugares malditos, y que pone a contraluz el esqueleto pétreo y perturbado de Nuestra Señora de las Lágrimas.
En 2007, Zeppelin TV produjo para Antena 3 una miniserie basada en la novela La piel del tambor, con Roberto Enríquez (La cocinera de Castamar) como el actor encargado de caracterizarse como Quart. Esta adaptación pensada para la televisión amplió los misterios del sacerdote a diferentes tramas, relacionadas con misterios eclesiásticos y traumas personales; algo que ha procurado evitar Sergio Dow, para centrarse en el argumento expuesto en la novela original de Pérez-Reverte.
Junto a Armitage, el elenco del film se nutre con la presencia de la dublinesa Fionnula Flanagan (Los otros), el estadounidense Paul Guilfoyle (CSI: Las Vegas), el inglés Paul Freeman (En busca del arca perdida) y la madrileña Amaia Salamanca (Fuga de cerebros), entre otros. Un heterogéneo cuadro escénico, pensado para dar verosimilitud a las búsquedas tenebrosas que acomete el convincente Quart.
