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Brad Pitt regresará a la actualidad cinematográfica con Heart of the Beast, una película de aventuras al límite de lo increíble, cuyo argumento transcurre en un tupido y agreste bosque ubicado en Alaska, Estados Unidos.
La acción de este film dirigido por David Ayer (con quien Brad Pitt había trabajado anteriormente en la cinta bélica Corazones de acero) recuerda en escenarios y algunas peripecias al largometraje Hacia rutas salvajes, donde Sean Penn -en calidad de director- mostraba las gestas de un atleta de élite llamado Christopher McCandless (a quien encarna Emile Hirsch), cuando se adentra en un ecosistema tan agresivo y salvaje como el de Alaska.
Sin embargo, y a pesar de las similitudes casuales, Heart of the Beast cuenta un relato menos amable que el de Hacia rutas salvajes; ya que centra su interés en un ex Navy Seal que debe sobrevivir a un brutal accidente acompañado únicamente de su perro, adiestrado para guiar a su dueño en situaciones desesperadas.
David Ayer no ha utilizado los paisajes de Alaska para ilustrar el film, sino que ha viajado con el nutrido equipo técnico y artístico a Queenstown, en Nueva Zelanda; donde ha encontrado la fisonomía que buscaba para mostrar la lucha contra los elementos, batalla que desarrollan el personaje de Brad Pitt y su fiel can.
Plan B. Entertainment, Wild Chicken Productions, Cedar Park Entertainment y Temple Hill Entertainment han financiado el movido trabajo que lidera el mediático Brad Pritt.
Una labor interpretativa en la que el rubio montañero de Siete años en el Tíbet obtiene la réplica de J.K. Simmons (La La Land) y Anna Lambe (True Detective),entre otros.
BRAD PITT SE HA SOMETIDO A UN PROGRAMA ESPECIAL DE EJERCICIOS FÍSICOS PARA PROTAGONIZAR “HEART OF THE BEAST”
A lo largo de su amplia trayectoria cinematográfica, Brad Pitt ha tenido que moldear su cuerpo y su mente en numerosas ocasiones, para meterse de lleno en personajes de distinta naturaleza emocional y física. Tras conducir un coche de carreras en F1,a las órdenes de Joseph Kosinski, el coprotagonista de Érase una vez en… Hollywood cambia los circuitos de velocidad por un acercamiento más humanista y ecológico hacia el ecosistema en el que tiene que moverse.
Tal planteamiento ha obligado a Pitt a someterse a un duro programa de entrenamiento físico; una preparación rigurosa para dotar de verosimilitud a su aguerrido personaje, quien sutilmente podría mantener alguna conexión combativa con el irreductible John Rambo.
Como enemigo invisible, el bosque de Alaska amenaza con destruir al esforzado Navy Seal, sobre todo si este no presta demasiada atención a los peligros que se le presentan continuamente. Esa naturaleza misteriosa y aniquiladora es “el corazón de la bestia” al que hace referencia el título del film.
Como referente clásico de la relación entre el hombre y la naturaleza en su estado primigenio, Las aventuras de Jeremiah Johnson es la película que viene a la mente de cualquier aficionado al séptimo arte. En esta cinta de 1972, Robert Redford mostraba la manera que tenía un individuo para aislarse del mundo en la América boscosa del norte.
Heart of the Beast parte, no obstante, de una tesis argumental casi contraria a la de Las aventuras de Jeremiah Johnson.
En la obra de David Ayer, el soldado al que encarna Brad Pitt pretende escapar de la inmensidad verde para regresar a la civilización; ya que su paso por el entorno que le domina es producto de la mala fortuna de un terrible accidente no provocado por el militar.
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