Elvis Presley dirige la orquesta
Elvis Presley vuelve a la actualidad con la remasterización de muchos de sus éxitos más conocidos, ahora acompañados por las melodías de The Royal Philharmonic Orchestra de Londres. El álbum lleva por título If I Can Dream (RCA Records).
Priscilla Presley declaró en una entrevista concedida a la edición estadounidense de Rolling Stone que El Rey siempre sintió una sincera admiración hacia la ópera, y en concreto hacia los tenores Mario Lanza y Caruso.
El hombre que construyo los mimbres del rock & roll con sus accesos vocales, cercanos al blues racial y al góspel elevado, tenía el sueño de grabar sus temas con el acompañamiento del clasicismo instrumental. Y la tecnología lo ha logrado treinta y ocho años después de su fallecimiento, sin por ello traicionar el espíritu electrizante con el que el cantante de Tupelo interpretaba cada una de las composiciones, aliñadas con su timbre grave y aterciopelado.
If I Can Dream (RCA Records) es el título escogido por los productores Nick Patrick y Dan Reedman para encajar un trabajo cargado de historia, en el que el trovador de Heartbreak Hotel demuestra que, en caso de haberse atrevido, no habría desentonado lo más mínimo al frente de un grupo orquestal de altura.
ELVIS REGRESA CON PARTITURAS EN EL ATRIL
Los Abbey Road Studios de Londres vivieron unas jornadas particulares y emocionantes, cuando el extenso material acreditado por Elvis Presley desembarcó en sus salas de grabación.
Al ritmo de las figuradas caderas del otrora muchacho criado en las orillas del Misisipi, las moquetas de la empresa ideada por The Beatles salieron a dar la bienvenida con los paraguas extendidos, eternamente seducidas por temas tan recordados como It’s Now or Never y Love Me Tender.
El incendiario Burning Love sirve de prólogo para dar cuerpo a este viaje musical, con destino a los paraísos de las décadas auditivas donde los vinilos llevaban el ADN de imponentes sellos como Sunset Records, mientras las guitarras de Scotty Moore y Bill Black extendían los trinos de The King; cual fieles escuderos del caballero de las baladas, el góspel, el blues y –cómo no- el rock & roll de pureza inigualable.
Con Priscilla como productora ejecutiva, If I Can Dream (título prestado del especial televisivo que Elvis protagonizó en 1968 para la cadena NBC) cumple con las exigencias de un guion en el que el estrellato de EP queda patentado por sus registros sorprendentes.
Una aventura de sensitivas esencias que reúne aclamadas líricas, escritas en su día por creadores de aguerridas carreras como Neil Diamond (And The Grass Won’t Pay No Mind); Hugo Peretti, Luigi Creatore y George Weiss (I Can’t Help Falling in Love); Mac Davis (In The Ghetto); Paul Simon (Bridge Over Troubled Water); y James Taylor (Streamroller Blues).
En total, catorce cortes que montan una fiesta contundente e inspiradora; cita que no han querido perderse el norteamericano Michael Bublé (quien interpreta con maestría la genial Fever) y el trío italiano Il Volo (It`s Now or Never).
If I Can Dream es el hit que cierra esta travesía orquestal de cuarenta y ocho minutos de duración; casi una hora que se pasa volando, y ante la que -“si se pudiera soñar”- solo cabría pedir un poco más de tralla demoledora…