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Creedence Clearwater Revival adquieren una nueva dimensión, a través del disco Quiero Creedence (Concord Music Group, Inc).
La banda californiana es adaptada a los ritmos hispanos por artistas tan variados como Juan Gabriel, Bunbury, Andrés Calamaro o Juanes.
El trabajo reúne catorce de los éxitos más conocidos del cuarteto estadounidense, todos ellos adaptados al estilo particular de cada uno de los músicos participantes.
En la esfera de los años sesenta la escena del rock se convirtió en un caleidoscopio de formas hipnotizadoras y experimentos enriquecedores, donde la inspiración comía a mesa puesta con la psicodelia y la genialidad.
Dentro de semejante panorama, Creedence Clearwater Revival (CCR) se convirtió en el grupo de las carreteras infinitas, sin horizontes limitados a géneros y corrientes.
John Fogerty y sus tres compañeros bebieron con pasión de las fuentes más diversas. Y, con el licor escanciado en su botijo talentoso, los cuatro californianos construyeron un sonido propio, que coqueteaba con el blues sureño de mestizaje terroso, el rock quemado por las grietas de las barras y estrellas, y las rebeliones guitarreras, alentadas por una suerte de grunge primitivo y sudoroso.
Siete álbumes y un lustro en activo dieron cuenta del portentoso currículo de los chicos llegados de El Cerrito: unos agitadores de maneras contagiosas, que volaron al aire de Woodstock’69 y edificaron barricadas contrarias a la Guerra de Vietnam (la musa descabezada de Samotracia de muchos de sus compañeros de generación y nacionalidad).
En un nivel similar a The Rolling Stones, The Beatles, Cream, The Who o Led Zeppelin, los autores de Bayou Country (uno de los mejores álbumes de la historia del rock) marcaron su sello con el fuego de la distinción, algo que extendió su imantada creatividad hacia hijos futuristas como Nirvana y Foo Fighters. Pero también agrandaron su influencia por latitudes y extensiones geográficas que ni siquiera imaginaban, tales como los paraísos permeables de la música española y latinoamericana.
Precisamente, la lengua de Cervantes dota de una faz sorpresiva a los conocidos estribillos y tonadas popularizados por CCR. Sensaciones que el productor Juan Manuel Caipo ha reunido en el disco Quiero Creedence (Concord Music Group, Inc).
CREEDENCE CLEARWATER REVIVAL MUTAN DE PIEL
Nada más arrancar el compacto, la sinuosa voz de Bunbury asienta el decorado coral, con su aguerrida interpretación de Corre por la jungla. Su versión de Run Through the Jungle resulta emulsiva, al igual que la que protagonizan Los Lobos en segundo lugar, con el tema Bootleg.
Sin embargo, la pronta incorporación de Have You Ever Seen the Rain? (rebautizada inexplicablemente como Gracias al sol), en la voz del mexicano Juan Gabriel, genera una inevitable reacción de extrañeza, ya que el implacable himno romántico de CCR no es el más adecuado para la garganta del conocido cantante centroamericano. Un efecto de distorsión, que enfatiza la incluso un grupo de mariachis, en calidad de acompañamiento.
“Ese es mi tema favorito de CCR, y por eso he procurado mantener su esencia; aunque he añadido un par de guitarras mariachis, para dotarle de un aspecto más divertido“, reconoce Gabriel, quien no puede emular la grandeza de versiones tan acertadas como la que llevó a cabo el escocés Rod Stewart.
Sin embargo, las excentricidades rancheras de Gabriel quedan pronto superadas, en cuanto Los Lonely Boys se ponen a destripar los instrumentos, al hilo de Born on the Bayou. Toda una declaración de intenciones por el lado salvaje de la lírica, que recupera el estilo alquitranado de los hermanos Fogerty (Tom y John), Doug Clifford y Stu Cook, destilado a lo largo de su trayectoria profesional como Creedence Clearwater Revival.
A Band of Bitches (Feelin’ Blue), Enjambre (Who’ll Stop The Rain), Andrés Calamaro (Long As I Can See The Light), Juanes (Molina), Brian Gibbons junto a La Marisol (Green River) y Diamante Eléctrico (Up Around The Band) son parte de los ilustres invitados, destinados a rendir tributo a los maestros estadounidenses de los hits cargados con la pólvora de las composiciones suicidas, siempre arriesgados en un mundo carente de eufemismos artificiales.
En su época, CCR lideraron su personal discurso creativo a través de la fuerza interpretativa, y de la contundencia melódica de sus electrizantes mensajes. Con semejantes coordenadas, los cuatro chicos de California escribieron cientos de renglones tensionados, cuyos caracteres firmaron una de las páginas más deslumbrantes en la historia del rock.
Una hazaña que queda más patente, incluso, con los vasos comunicantes que el cuarteto sesentero estableció entre los artistas que se expresan en español.
Vídeo de Have You Ever Seen The Rain? (Gracias al Sol), por JuanGabrielVEVO
