Clive Owen emula a Richard Burton
El protagonista de "Closer" encabeza el elenco interpretativo de "La noche de la iguana": versión teatral de la célebre película de John Huston.
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Clive Owen ha forjado su carrera artística con las virtudes de los tipos duros alumbrados por destellos de vulnerabilidad; como si su pétreo rostro ofertara selectas posibilidades de zozobra, más allá de las meras apariencias y de las musculaturas metálicas.
Esta característica ha permitido a la estrella de Hijos de los hombres construir un plantel de personajes variados y diferentes, pese a estar habitualmente incluidos en los prototipos de macho-men, con sonrisa de pocos amigos y hercúlea prestancia.
Precisamente, su mirada de acero, ligeramente agresiva y mediada por un cierto desequilibrio interno, es la que ha convertido a Owen en el actor más adecuado para meterse en la piel del confuso reverendo T. Lawrence Shannon: el deslustrado religioso, que protagoniza la trama de La noche de la iguana.
El vetusto Noël Coward Theatre de Londres es el templo escénico que acogerá, a partir del 6 de julio, las representaciones de tan sugerente obra, que el dramaturgo Tennessee Williams estrenó en Broadway, en 1961.
Un texto sulfúrico, que adquirió formato de fotogramas en movimiento de la mano de John Huston, en 1964; filme que contó con la asfixiante interpretación del galés Richard Burton, como el perdido T. Lawrence Shannon.
James MacDonald (¿Quién teme a Virginia Woolf?) será el encargado de dirigir al actor nacido en Coventry; y encuadrarlo en el interesante plantel de actores, que acompañan al esbelto atracador de Plan oculto.
Un cuadro dramático en el que se encuentran Lia Williams (Oleanna), Anna Gunn (Breaking Bad) y Julian Glover (Juego de tronos), entre otros.
CLIVE OWEN SE ENFRENTA CON LA RELIGIÓN
Tennessee Williams concibió La noche de la iguana como un viaje sin retorno a los infiernos de las debilidades humanas, y a la asunción de los laberintos sin salida en los que están encerrados los hombres y las mujeres, sin posibilidad de huir a edenes salvadores.
La trama de la obra comienza con el reverendo llamado T. Lawrence Shannon, el cual es apartado de la iglesia por definir a Dios como “un delincuente senil”. Semejante falta de Fe, pronunciada en un sermón, da con los huesos del religioso fuera de la vida eclesiástica. Esto hace que el individuo acepte un trabajo en una agencia de viajes de escaso caché monetario, hundido en el paisaje ilusorio del México de 1940.
Allí, entre calor y tequila, Shannon comete estupro con una joven turista de 16 años, mientras se deja seducir por la dueña de un hotel; y anhela la redención sentimental de la mano de una artista problemática, llamada Hannah Jelkes.
Clive Owen ofrece toda su artillería dolorosa, para exhibir las cicatrices palpitantes del exministro de la Iglesia al que encarna; y la arropa con parte de los guiños somnolientos que el sólido Richard Burton imprimió a la psique de Shannon, en la película de 1964.
El Noël Coward Theatre transforma su interior, bajo estas consignas de supervivencia conjunta, en un retrato coral de seres desubicados; quienes danzan sin rigor en el deformado decorado de la existencia. Unos tipos que se dedican a tirar figuradamente de la correa que los expone al inclemente sol de México, justo como si fueran la iguana del título.
MacDonald recoge la atmósfera de rendición, que asoma en cada escena de La noche de la iguana; y la plasma con sobriedad y contundencia, en medio de un espacio de luces y sombras; en sintonía con el que Williams imaginó para ilustrar su libreto con la búsqueda de una paz inexistente.
Un caldo de cultivo que Owen y el resto del casting están obligados a potenciar, simplemente subidos a lomos de las vulnerabilidades eternas del malditismo irrefrenable.
Nota.- The Night of the Iguana estará en el Noël Coward Theatre, del 6 de julio al 28 de septiembre de 2019.
Más información, entradas y horarios en
https://www.noelcowardtheatre.co.uk
