Paolo Sorrentino es un cineasta obsesionado por transmitir emociones a golpe de imágenes, sin importarle demasiado las ambiciones comerciales vacuas o la espectacularidad artificiosa que
Paolo Sorrentino es un cineasta obsesionado por transmitir emociones a golpe de imágenes, sin importarle demasiado las ambiciones comerciales vacuas o la espectacularidad artificiosa que