Justin Bieber refuerza su confianza

Justin Bieber refuerza su confianza

0 0
Read Time:4 Minute, 3 Second
Justin Bieber
Justin Bieber se ampara en la sobriedad, en su álbum “Swag”.

Justin Bieber ha pillado casi por sorpresa a la mayoría de sus fans y a la industria discográfica, al editar su séptimo álbum (Swag) aparentemente en secreto, el pasado 11 de julio. El cantante canadiense llevaba un tiempo sin pisar un estudio de grabación (desde la publicación del pletórico Justice, en 2021), y sus miles de seguidores extrañaban la ausencia voluntaria de una estrella del calibre del responsable del hit teenager One Time. Sin embargo, la campaña fotográfica previa que Bieber y sus amigos habían desplegado vía Instagram hacía presagiar que se avecinaba una nueva obra del artista del pop nacido en Ontario.

Tras unos años desenfrenados, en los que Bieber a batido récords que atesoraban iconos inmortales de la música como Elvis Presley y Michael Jackson, el otrora muchacho del peinado EMO ha alcanzado una madurez sólida y reconfortante en este 2025. Un abordamiento de la edad adulta que JB asume a los treinta y un años de edad, marcado por lo que significa ser padre por primera vez. Fruto de esas sensaciones determinantes ha surgido Swag (Def Jam Rcordings/ Universal Music): una obra compuesta por veintiuna píldoras sonoras, en las que el ganador de dos premios Grammy se muestra sin máscaras efectistas, simplemente sujeto a los accesos confesionales que erigen cada una de sus canciones, interpretadas en tonos medios y sin orquestaciones ensordecedoras.

Justin Bieber
Justin Bieber dejó rastros de su trabajo a través de las redes sociales.

A tenor de su frenética carrera hacia el éxito, resulta difícil separar al creador que desea exhibir su talento en Swag, del fenómeno mediático que respresenta la marca ensamblada por el superventas Justin Bieber. Desde su llegada al mundo de la música a los quince años, el compatriota de Bryan Adams ha explotado su capacidad para enlazar hits sin tregua alguna, como si la ansiedad venciera a la necesidad de definir un estilo propio y reconocible.

Swag parece enfatizar el momento del cambio; aunque en realidad es -como indica el título del Cd– una especie de reafirmación de seguridad en sí mismo, un intento de escapar de las vacuidades mercadotécnicas y multimillonarias que le sumieron en un proceso depresivo de enorme calado artístico.

JUSTIN BIEBER BUSCA AFRONTAR SU MADUREZ PERSONAL CON EL DEBIDO APLOMO Y LA NECESARIA SEGURIDAD EN SÍ MISMO

Las veintiuna canciones que alimentan la narración entre luces y sombras de Swag se asemejan a un diario de sesiones, donde el psicoanalista es quien escucha cada una de las citas protagonizadas por Bieber. Un puzle de desconstrucción propia, en el que destaca el corte titulado enfáticamente Therapy Session, en el que JB comparte micrófono con el humorista Druski.

Sin la habitual parafernalia discotequera que ha acompañado al cantante desde sus comienzos, Bieber pretende sumergirse en una sobriedad necesaria y estimulante; acompañado por colaboradores tan interesantes y enriquecedores como el rapero Gunna, Dijon, Lil B, Sexyy Red, Cash Cobain, Eddie Benjamin y el pastor religioso Marvin Winans, entre otros. Semejante fórmula permite al músico canadiense tocar asuntos tan determinantes en su existencia como su paternidad, o la manera de luchar con los problemas mentales auspiciados por la persecución mediática y el éxito mal digerido.

Justin Bieber
Justin Bieber ha grabado “Swag” en Islandia.

El pop suave y melodioso del artista de Ontario afila un poco sus bordes sensibles en Swag, aunque no alcance los entornos dramáticos del R&B profundo, que se llegó a preconizar desde algunas prestigiosas cabeceras de la industria discográfica. Esto permite a Justin canalizar un sinfín de sentimientos, en temas tan acertados como All I Can Take, Daisies , Go Baby o Butetrflies, que revelan a un compositor con ganas de ir más allá de su universo de cartón piedra y estadios llenos a rebosar.

Una de las características que mejor definen el séptimo trabajo de estudio de Bieber es que ninguna de sus cápsulas sonoras tienen el marchamo de hits señeros y obsesivos. Un denominador común que confirma lo que el título del disco apunta: el antiguo adolescente con ganas de revolucionar los escenarios quiere ahora fortalecer su apuesta creativa, mediante el intento de depurar su estilo y la confianza en sí mismo. Algo que es difícil de mantener por mucho tiempo, sobre todo si no llegan a acompañarle los números en ventas, y los grandes sellos le obligan a seguir un camino híbrido entre la introspección y el triunfo en las ondas (algo similar a lo que ejercitan con estilo Ed Sheeran, Miley Cyrus, Taylor Swift y Harry Styles, entre los más conocidos).

Nota: Justin Bieber se retiró a Islandia para grabar Swag, en cuya portada aparece jugando con su hijo.

Más información en

https://www.universalmusic.com

Happy
Happy
0 %
Sad
Sad
0 %
Excited
Excited
0 %
Sleepy
Sleepy
0 %
Angry
Angry
0 %
Surprise
Surprise
0 %

Average Rating

5 Star
0%
4 Star
0%
3 Star
0%
2 Star
0%
1 Star
0%

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Choose your language