Jacob Elordi vive, a sus veintiocho años, un gran momento profesional. Después de convertirse en la criatura de Frankenstein, a las órdenes de Guillermo del Toro, y de ser un Heathcliff especialmente sensual, en la última versión de Cumbres borrascosas; el espigado actor australiano acaba de finalizar el rodaje de la distopía The Dog Stars: una obra en clave apocalíptica que dirige el británico Ridley Scott, la cual adapta la novela homónima de Peter Heller.
Elordi llegó a convencer a Scott tras la imposibilidad de contar con el irlandés Paul Mescal, quien acababa de trabajar con el cineasta de Los duelistas en la segunda y fallida entrega de Gladiator. El oceánico se metió con eficacia en el papel del deprimido y amargado piloto de aviones llamado Hig, un hombre que vive en completo aislamiento con su perro y un amigo exmarine, mientras intenta sobreponerse a la muerte por enfermedad de su esposa.
Ridley Scott ha escenificado la región de Colorado -en la que se desarrolla la novela- en la zona comunitaria de Bordano, en Italia. Un decorado que ha permitido al director de Blade Runner grabar también en Avezzano, Roma y en los legendarios estudios de Cinecittà. Semejante itinerario le ha valido para reflejar el mundo agonizante de una humanidad mermada por una epidemia devastadora de gripe; reminiscencias víricas que recuerdan vagamente a lo sucedido con el coronavirus.
RSc ha confiado la escritura del guion a Mark L. Smith (El renacido) y Christopher Wilkinson (Nixon), quienes han intentado reflejar el dramático universo ideado por el escritor Peter Heller. Un cosmos ligado a la destrucción de la sociedad por la proliferación de una terrible pandemia, dolencia que exhibe las enormes grietas de debilidad planetaria, y que aprovechan los salvajes carroñeros conocidos como Los segadores.
JACOB ELORDI Y JOSH BROLIN SE EMPEÑAN EN SALVAR A LA TIERRA DE UNA DESTRUCCIÓN ABSOLUTA Y DEFINITIVA
La aparición del libro The Dog Stars se produjo en 2012, años antes de que la COVID-19 confinara a los humanos para no fallecer ante los efectos agresivos de la citada cepa vírica originada, supuestamente, en un laboratorio. La identificación con la realidad -en clave visionaria- respecto al texto de Heller, pese a que este tiene lugar en el futuro, captó la atención de los lectores de una manera acertada e inteligente. Uno de esos admiradores de lámpara de noche e infusión aromática fue Ridley Scott, quien descubrió la magia activa de un relato emotivo y sensible.
Con el trabajo fotográfico de Erik Messerschmidt y la música de Harry Gregson-Williams, el realizador de Alien ha construido una película que mezcla la épica con el sufrimiento, el ansia de supervivencia con la lucha constante por no traicionar la propia identidad, la rebelión de las ascuas humanas con el enfrentamiento de los que desean acabar con un mínimo de vida en la otrora fértil y esperanzadora Tierra.
El argumento de The Dog Stars arranca de una forma parecida al de La carretera (la película de John Hillcoat, sobre el homónimo libro de Cormac McCarthy); con un escenario sombrío y siniestro, dominado por la muerte y la desconfianza entre los supervivientes. En ese depreciado lugar, Hig (Jacob Elordi) es un piloto que sufre en silencio la pérdida de su esposa, por causa una gripe agresiva y criminal. El joven se dedica a volar con su viejo Cessna y a convivir con su perro en un hogar aislado y presidido por la depresión medioambiental. Tan solo, la compañía de un rudo exmarine llamado Bangley (Josh Brolin) mantiene a Hig en contacto con sus congéneres.
Un día, Hig recibe una comunicación por radio; lo que le da esperanzas de que no todos los humanos han caído víctimas del virus y de los temibles Segadores. Junto a su perro y a Bogsley, el piloto emprende el viaje en busca de los que han lanzado el citado mensaje; pero los peligrosos carroñeros no les van a poner las cosas fáciles al protagonista y a sus amigos.
Nota: The Dog Stars tiene prevista su fecha de estreno para el próximo 27 de marzo de 2026.
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