Belén Rueda no suele frecuentar los escenarios teatrales; pero, cuando lo ha hecho, siempre ha sido en espectáculos de notables ambiciones artísticas y resultados más que brillantes.
Closer (a las órdenes de Mariano Barroso) y La caída de los dioses (donde contó con la dirección del malogrado Tomaž Pandur) son los dos títulos que confirman la frase inicial. Un listado de arriesgados ingredientes dramáticos, que la intérprete madrileña tiene previsto aumentar a partir del 19 de agosto, cuando estrene el montaje de Penélope, bajo la guía de Magüi Mira.
Esta obra de aguerridos contornos, calificada por Mira como una actualización sutil del mito inmortalizado por Homero en La Odisea, ha sido escogida para cerrar la 66 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida. Cita singular y determinante, sobre todo en este año marcado por la pandemia del coronavirus; y que sirve para lanzar el mensaje de que “hay que empezar a crear otra vez cultura“, como reconoce Magüi Mira, en la página web del festival.
“Dieciocho actores y actrices sobre las piedras de Mérida contarán la mágica historia de una Penélope que quiere echarse al mar. Una Penélope que quiere navegar en las aguas de los mares, serenos… o enfurecidos“, puntualiza Mira.
El milenario templo escénico de Mérida acogerá -del 19 al 23 de agosto– este retrato sincero y profundo de la esposa del rey de Ítaca; la cual debe mantener su férrea voluntad de esperar a su pareja sentimental, asediada por un grupo de nobles que ansían desposarla, para así granjearse el gobierno de las tierras que conforman el reinado del supuestamente muerto Ulises.
BELÉN RUEDA DA VIDA A LA INTELIGENTE TEJERORA DE ÍTACA
Pentación Espectáculos S.A. y el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida coproducen este imaginativo acercamiento hacia la figura de Penélope; avalado por una perspectiva abiertamente humana, y voluntariamente feminista.
Sin embargo, la batalla que emprende la musa espartana no es de escudos y armas, de revoluciones colectivas ni derrocamientos de costumbres; la lucha de la madre del joven e irascible Telémaco es la de una mujer que no quiere ser un simple objeto, ante los vaivenes de su incierto destino. Una persona, a la que le sienta bien el calificativo de heroína, que desea hacer valer sus decisiones, y preservar su espacio existencial.
La versión de Magüi Mira contiene los aspectos sensitivos y privados que dotan de identidad a la renovada Penélope; la niña a la que su padre (el rey de Esparta) intentó ahogar en las aguas del Egeo, y que fue rescatada por una bandada de patos salvajes, que la llevaron en volandas a la orilla. Ese es el espíritu que intenta transmitir el libreto original, en el que hay lugar para los silencios prolongados, las declaraciones a la oscuridad, y la música alentadora (preparada para el montaje por David San José Cuesta).
María Galiana (Solas), Maxi Iglesias (Velvet), Jesús Noguero (La corona partida) y Pedro Almagro (La punta del iceberg) son algunos de los actores que acompañan a Rueda, en este viaje al universo de la Guerra de Troya. Un traslado a las extensiones de las rebeliones humanas contra los caprichosos dioses, y a las geografías de las leyendas forjadas a golpe de eternidades vulnerables.
Semejantes elementos conjuntan el montaje dirigido por Magüi Mira, en el que también subyace el pulso de la actualidad, evocado por la actitud de su protagonista; quien debe sacar fuerzas de flaqueza para no enmudecer por cobardía, ante los dictados de una sociedad que pretende asfixiar su libertad.
Nota: Penélope estará en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, del 19 al 23 de agosto.
Más información, entradas y horarios en
https://www.festivaldemerida.es/programacion/penelope