Jim Dine recorre su existencia

El octogenario artista estadounidense reúne en el interior del Centro Pompidou de Málaga una treintena de sus obras, elaboradas entre 1961 y 2016.
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Jim Dine es un creador al que siempre le ha gustado el mestizaje en los formatos/ Foto: Centro Georges Pompidou de Málaga

Jim Dine siempre ha mostrado una especial devoción hacia el artesano Gepetto, y hacia el atormentado y esperanzado muñeco llamado Pinocho. El cuento de Carlo Collodi es para JD un singular simposio de emociones y sentimientos, que casan a la perfección con la concepción que el pintor, escultor, grabador y poeta nacido en Cincinnati (Ohio, USA) tiene de la manera en que surge un lienzo, un verso o una simple idea. Tal vez, debido a semejante dependencia afectiva y sentimental, la figura del pequeño Pinocho preside literalmente la exposición que el Centro Pompidou de Málaga dedica en estos meses veraniegos al trabajo del otrora socio profesional de Claes Oldenburg.

Aunque el germen de la muestra no es exactamente la gasolina inspiradora que la historia de Collodi ha proporcionado al cerebro activo de Dine a lo largo del tiempo, sino una reciente donación que el propio artista realizó en beneficio del Musée National d’Art Moderne, perteneciente al Centro Georges Pompidou de París.

Esta acción (con la que el estadounidense da un gran paso para asegurarse el necesario peso en el circuito internacional en el futuro, más allá de su existencia o no en el mundo) ha motivado al creador de la nación de las barras y estrellas para llevar a cabo una especie de revisión sincera de sus obras de juventud, en las que permanece impreso el espíritu libertario de un hombre con alergia a sumarse a los grandes movimientos de su época.

Jim Dine se resistió a ensamblar una única línea de evolución/ Foto: Centro Georges Pompidou de Málaga

Ni el Pop Art, ni el Expresionismo Abstracto, ni el Op Art…. Las corrientes aglutinadoras quedaban un tanto escasas para encerrar el impulso plástico de Dine. Elección que le permitió ensamblar desde sus inicios las tesis y los mensajes más introspectivos de su peculiar autobiografía, a base de objetos que contemplaban su cotidianidad familiar, sin importar el formato en el que desplegar tales pensamientos: íntimos y universales.

JIM DINE Y SU PAISAJE DE COLORES Y TONOS APAGADOS

Desde los happenings y los enviroments de finales de los cincuenta y principios de los sesenta, la naturaleza vanguardista y rebelde de JD ha viajado con singularidad por los lustros; alumbrada por un sinfín de conexiones afectivas con respecto a su estado de ánimo. Un hilo conductor que el creador norteamericano se ha encargado de documentar década tras década, con los poemas que acompañan a la mayoría de sus piezas.

Precisamente, estas composiciones líricas adquieren un protagonismo escénico impactante y elocuente, dentro del recorrido propuesto por la muestra del Centro Pompidou de Málaga.

Tal artificio gráfico, para nada carente de sentido, inunda las paredes de la institución andaluza; las cuales aparecen surcadas por sorprendentes y reflexivas palabras manuscritas por Dine, muchas de ellas pensadas en exclusividad para acompañar a la exposición.

Jim Dine ha retratado su mundo década tras década, a través de sus obras

En el citado escenario de habitaciones figuradas, los rojos retan con premura a los amarillos, mientras los negros esperan su turno para solventar su particular afrenta con los azules. Una batalla sin fin, que convierte el currículo visual de Jim Dine en un continuo choque de índole sentimental y psicológica; donde las herramientas, los corazones, los albornoces y las venus improvisadas pierden su significado real, para ser algo mucho más profundo y sin manufacturas exclusivistas.

Bajo estas coordenadas, las treinta piezas escogidas por el Centro Pompidou de Málaga ilustran a la perfección las tormentas pigmentadas que hicieron del creador de Cincinnati un tipo dado a las imaginaciones enrabietadas. Impulsos nerviosos que ahora están más serenos, debido sobre todo a la asunción de la madurez vivencial y a la confesada ausencia del alcohol, a la hora de verbalizar lo que transmiten sus obras.

Nota.- La exposición de Jim Dine estará en el Centro Pompidou de Málaga, hasta el próximo 6 de octubre de 2019.

Más información, entradas y horarios en

https://www.centrepompidou-malaga.eu

 

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